martes, 16 de noviembre de 2010

Metodología y evaluación de la OP

La base democrática del concepto de OP es discutible. Las decisiones que se apoyan en la OP se hacen por medio de publicidad y comunicación, pero la comunicación es, simplemente, una herramienta tanto para la persuasión como para la recogida de información. “El debate público se refiere principalmente a un debate entre actores de la política contendientes , que se retransmite por los medios de comunicación para que las personas del público atento lo observen y mediten (y, mucho menos frecuentemente, participen). EJEMPLO DE LA RE-REELECCIÓN.
Ya no hay política sin medios ni sondeos. Complementariedad natural: la acción, para los políticos; la información, para los medios; el conocimiento del estado de la opinión, para los sondeos. Estos tres componentes de la política moderna no pueden existir sin los otros y son contrapeso mutuo entre ellos. La política: en la democracia masiva es inseparable de los medios y sondeos, únicos medios para asegurar cierta “comunicación” entre los políticos y el electorado.

Cárteles en México

El narcotráfico es una industria mundial ilegal que consiste en el cultivo, manufactura, distribución y venta de drogas ilegales

El narcotráfico opera de manera similar a otros mercados subterráneos, varios carteles de drogas se especializan en procesos separados a lo largo de la cadena del suministro

En México hay 7 grandes carteles de la droga y decenas de otros más que dominan el narcotráfico en todo el territorio de la Republica Mexicana:
- Cartel de Tijuana
- Cartel de Colima
- Cartel de la Familia Michoacana
- Cartel del Golfo
- Cartel de los Zetas
- Cartel de Sinaloa
- Cartel de Juárez

Los Mass Media y su participación en la OP


Medios de comunicación masivos o de masas (término también muy utilizado directamente en inglés: mass media) son los medios de comunicación recibidos simultáneamente por una gran audiencia, equivalente al concepto sociológico de masas o al concepto comunicativo de público.
La finalidad de estos medios de comunicación es, según la fórmula acuñada específicamente para la televisión, formar, informar y entretener al público que tiene acceso a ellos. Atendiendo a los intereses que defienden, buscan el beneficio económico del empresario o grupo empresarial que los dirige, habitualmente concentrado en grandes grupos de comunicación multimedia, e influir en su público ideológicamente y mediante la publicidad.
Todos los ciudadanos del mundo están expuestos a unos u otros medios, que resultan indispensables como herramienta de comunicación y presencia pública para todo tipo de agentes económicos, sociales y políticos.
La comunicación de masas es el nombre que recibe la interacción entre un emisor único (o comunicador) y un receptor masivo (o audiencia), un grupo numeroso de personas que cumpla simultáneamente con tres condiciones: ser grande, ser heterogéneo y ser anónimo. Los medios de comunicación de masas son sólo instrumentos de la comunicación de masas y no el acto comunicativo en sí.

El rumor como elemento de desinformación.

La desinformación ha existido siempre, pero su utilización masiva a través de los medios de comunicación surge a consecuencia de la conflictividad creciente de los grupos humanos, y más concretamente a consecuencia de los procesos de cambio en una sociedad conservadora.

El punto de partida de la consideración, siempre cierta, de la necesidad de utilizar la información como arma, lo que inevitablemente trae consigo la necesidad de modificar la información en función de unos objetivos concretos de alguna de las partes del conflicto. Para que exista desinformación es necesaria una intención. Sin intención de desinformar no hay desinformación. Podría haber desidia, falta de información, carencia, pero nunca desinformación. Una información truncada o insuficiente, si es resultado de un proceso intencional, es siempre deformadora.
En la guerra psicológica, de gran importancia en todo tipo de conflicto, los adversarios recurren siempre a mecanismos desinformativos. A través de mensajes tratarán de provocar en el receptor cambios de opinión, de actitud o de actuación favorable al objetivo táctico o estratégico propio.
La “veracidad” del mensaje se sustituye entonces por la credibilidad subjetiva. Lo importante no es que un mensaje sea o no cierto, sino que sea creíble. De ahí que la persuasión se convierta en la principal preocupación del emisor de mensajes informativos. Siempre bajo las premisas del adagio “convencer es vencer”.
La desinformación transciende a la ética y su única norma es la efectividad y el éxito mediante la confusión del adversario y el debilitamiento de su resistencia. Con mensajes construidos hábilmente el emisor consigue englobar al receptor en su sistema. De ahí que pueda presentarse dentro de un abanico tan amplio que va desde la falsedad hasta una aproximación tal, con la información veraz, que el límite es difícilmente perceptible. Se la define como “la técnica que consiste en proporcionar a terceros informaciones generales erróneas llevándoles a cometer actos colectivos o a difundir opiniones que correspondan a las intenciones del desinformador”. La desinformación es uno de los recursos más importantes del poder político para minar la resistencia de su adversario. De ahí que sea precisamente el poder político el máximo difusor de mensajes desinformativos.
Para que el mensaje desinformativo sea eficaz precisa de un calculado y permanente goteo en su difusión. La elección del momento es un aspecto esencial para la eficacia del mensaje. No es casual, por tanto, que sea casi siempre en determinados contextos cuando los medios de comunicación difunden informaciones con claros signos desinformativos.

Etapas de la formación de la opinión pública.

Visión racionalista: que pertenece y arranca de la concepción liberal tradicional del hombre y la sociedad. De acuerdo con la tesis fundamental de la Ilustración, los hombres nacen libres e iguales, dotados de racionalidad, y por consiguiente tienen derecho a sustentar diversos puntos de vista sobre las cuestiones que les afectan. Supuesta la racionalidad innata del hombre, en la discusión abierta del cúmulo de opiniones diferentes sobre un mismo tema, aquella que obtenga un mayor número de adhesiones acabará revelándose como la más adecuada. Si honestamente todos buscan la verdad, la coincidencia del mayor número tenderá a coincidir con la propuesta más racional. Autores: Gino Germani y Robert Park, entre otros.
Visión irracionalista: Diametralmente opuesta a la anterior, plantea que la opinión pública o la faceta de ella que más fuertemente adquiere categoría de presión social es la que surge de prejuicios irracionales e intransigentes, escasamente basados en la realidad de los hechos y sin embargo comúnmente compartidos por la mayoría de la comunidad de modo visceral. Esta interpretación ha sido sostenida por autores temporal o ideológicamente tan dispares como Maquiavelo, Locke o Stuart Mill, los cuales, en la totalidad o parte de sus escritos, no dudaron en describir la “Voz del Pueblo” como ignorante, egoísta, caprichosa, voluble, intransigente y al mismo tiempo fácil de manipular. Autores: Walter Lippmann y Elisabeth Noelle-Neumann (La espiral del silencia), entre otros.
Visión de la superestructura ideológica de clase: Está a mitad de camino entre las visiones racionalista e irracionalista. La posición dentro de la estructura de producción, el momento histórico, etc. Determinan el tipo de pensamiento y de ideología que expresará cada individuo por tendencia natural. En dicho esquema es lógico que la ‘ideología burguesa’ corresponda a la visión y posición en el mundo de la ‘clase burguesa’. La opinión pública, entonces, no proviene del debate racional entre todos los hombres libres e iguales –como señalaba el liberalismo clásico- sino que constituye el resultado fragmentado horizontalmente de las distintas clases que conforman la sociedad. Autores: Carlos Monzón, Silvia Molina, entre otros.
Visión intelectualista, institucionalista y funcionalista: Comparando las tesis que sobre el papel e importancia de los intelectuales aportan la “sociología del conocimiento” y el radicalismo meritocrático orteguiano, puede establecerse una clara convergencia: Tanto si procede de una variante “izquierdista” como de una “conservadora de derechas”, la visión intelectualista preconiza la salvaguarda racionalista de la opinión pública sólo en el caso de limitarse o estar influida por las corrientes de opinión emanadas de los intelectuales. La institucionalista, versión más reciente y pragmáticamente mediocre del intelectualismo, sostiene que la cristalización o representación genuina de la opinión pública es el Parlamento. El funcionalismo, cuyo autor más representativo es Niklas Luchmann, es una visión dualista: institucional y funcional. La “función” que cumplen en el sistema social diversos elementos de simplificación es justamente preservar la cohesión del propio sistema.
Visión crítica o industrial: El espacio público abandonado a las tendencias de la sociedad industrial y consumista estará dominado por corrientes de opinión irracionales, fácilmente persuadibles por los técnicos del marketing o la propaganda. Las corrientes de opinión racionales, capaces de purificar lo anterior, sólo podrán surgir cuando se instaure un estilo y unas condiciones de debate en libertad y con esfuerzo comprometido de todos los intervinientes por alcanzar acuerdos sólidamente racionales. Autores: Jürgen Habermas y la Escuela Crítica de Frankfurt.

La formación de la opinión pública.

Desde los años treinta del siglo XX, primero en Estados Unidos y, poco más adelante en Inglaterra y Europa continental, comienza a hacerse explícito el interés por el fenómeno de la “Opinión Pública”, debido a la extensión de los llamados “estudios de opinión”, al menos en lo que ha sido su forma predominante: la encuesta estadística. Y debe ser que “eso” de la “opinión pública” importa; si no, ¿cómo justificar los cuantiosos gastos que las distintas administraciones, gobiernos, partidos políticos, medios de comunicación y otras entidades dedican a la realización de dichos estudios?
Sin embargo, estos desarrollos se han producido no sin dificultades debido a la naturaleza de lo que se pretende conocer: la opinión pública. Normalmente, al tratar de definir este término, se generan grandes problemas para llegar a una definición consensuada entre los distintos autores del tema que, desde los años treinta, reflejarán en sus escritos, tanto el debate que suscita la relación entre los conceptos de actitud y opinión, como el reconocimiento de las limitaciones de los instrumentos metodológicos con que se contaba hasta ese momento (básicamente escalas de actitud y encuestas), para reflejar cuantitativamente entidades difícilmente objetivables (¿qué se logra medir realmente?).

De aquel debate, todavía no resuelto, parece haber quedado de manifiesto que la “actitud” es una “tendencia a actuar” relativamente estable que el individuo abstrae de su cultura o de un grupo de experiencias; en cambio, la “opinión”, aunque parece llevar implícita una actitud, sería más bien la expresión pública sobre un tema controvertido, fundamentalmente a través del lenguaje, pero también por gestos, signos o símbolos. Sería erróneo considerar que la opinión pública es una fuerza constante con características permanentes, ya que, más bien al contrario, tendría un carácter dinámico: se trata de una diversa y cambiante forma de expresión social. Debido a que la opinión tiene su origen en distintas esferas de la sociedad, puede adoptar distintas características según las circunstancias, y exhibir, como hemos dicho, distintas formas de expresión. Por ello, encontramos autores que hablan de la perspectiva situacional al referirse a la opinión pública, considerando como “público” la colección de individuos que realmente forma y expresa opiniones sobre un tema específico en un momento concreto. Dado que las condiciones de la población cambian de situación a situación, las características de la opinión pública cambian de un contexto a otro, de forma que las variaciones que ésta experimenta se explican como resultado de las interacciones entre creencias, valores de los individuos y condiciones sociales y políticas.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

PECADOS CAPITALES















Los siete pecados capitales son una clasificación de los vicios mencionados en las primeras enseñanzas del cristianismo y el catolicismo para educar a sus seguidores acerca de la moral cristiana. La Iglesia católica romana divide los pecados en dos categorías principales:

pecado venial aquellos que son relativamente menores y pueden ser perdonados a través del sacramento.
pecado mortal los cuales, al ser cometidos, destruyen la vida de gracia y crean la amenaza de condenación eterna a menos que sean absueltos mediante el sacramento de la penitencia, o siendo perdonados después de una perfecta contrición por parte del penitente.

Los pecados capitales son enumerados por Santo Tomás de Aquino (I-II:84:4) como siete: vanagloria (orgullo, soberbia), avaricia, glotonería, lujuria, pereza, envidia, ira.


LUJURIA
La lujuria (en latín, luxuria) es usualmente considerada como el pecado producido por los pensamientos excesivos de naturaleza sexual. Según otro autor[cita requerida] la lujuria son los pensamientos posesivos sobre otra persona. Debido a su intrínseca relación con la naturaleza sexual, la lujuria en su máximo grado puede llevar a compulsiones sexuales o sociológicas y/o transgresiones, incluyendo la adicción al sexo, el adulterio y la violación.

GULA
Actualmente la gula (en latín, gula) se identifica con la glotonería, el consumo excesivo de comida y bebida, en cambio en el pasado cualquier forma de exceso podía caer bajo la definición de este pecado. Marcado por el consumo excesivo de manera irracional o innecesaria, la gula también incluye ciertas formas de comportamiento destructivo. De esta manera el abuso de substancias o las borracheras pueden ser vistos como ejemplos de gula.






AVARICIA
es —como la lujuria y la gula—, un pecado de exceso. Sin embargo, la avaricia (vista por la Iglesia) aplica sólo a la adquisición de riquezas en particular. Tomás de Aquino escribió que la avaricia es «un pecado contra Dios, al igual que todos los pecados mortales, en lo que el hombre condena las cosas eternas por las cosas temporales».
Estos incluyen deslealtad, traición deliberada, especialmente para el beneficio personal, como en el caso de dejarse sobornar. Búsqueda y acumulación de objetos, robo y asalto, especialmente con violencia, los engaños o la manipulación de la autoridad son todas acciones que pueden ser inspirados por la avaricia. Tales actos pueden incluir la simonía.

PEREZA
es el más «metafísico» de los pecados capitales, en cuanto está referido a la incapacidad de aceptar y hacerse cargo de la existencia de uno mismo. Es también el que más problemas causa en su denominación. La simple «pereza», más aún el «ocio», no parecen constituir una falta. Hemos preferido, por esto, el concepto de «acidia» o «acedía». Tomado en sentido propio es una «tristeza de ánimo» que aparta al creyente de las obligaciones espirituales o divinas, a causa de los obstáculos y dificultades que en ellas se encuentran. Bajo el nombre de cosas espirituales y divinas se entiende todo lo que Dios nos prescribe para la consecución de la eterna salud (la salvación), como la práctica de las virtudes cristianas, la observación de los preceptos divinos, de los deberes de cada uno, los ejercicios de piedad y de religión. Concebir pues tristeza por tales cosas, abrigar voluntariamente, en el corazón, desgano, aversión y disgusto por ellas, es pecado capital. Tomada en sentido estricto es pecado mortal en cuanto se opone directamente a la caridad que nos debemos a nosotros mismos y al amor que debemos a Dios. De esta manera, si deliberadamente y con pleno consentimiento de la voluntad, nos entristecemos o sentimos desgano de las cosas a las que estamos obligados; por ejemplo, al perdón de las injurias, a la privación de los placeres carnales, entre otras; la acidia es pecado grave porque se opone directamente a la caridad de Dios y de nosotros mismos. Considerada en orden a los efectos que produce, si la acidia es tal que hace olvidar el bien necesario e indispensable a la salud eterna, descuidar notablemente las obligaciones y deberes o si llega a hacernos desear que no haya otra vida para vivir entregados impunemente a las pasiones, es sin duda pecado mortal.


IRA
puede ser descrita como un sentimiento no ordenado, ni controlado, de odio y enojo. Estos sentimientos se pueden manifestar como una negación vehemente de la verdad, tanto hacia los demás y hacia uno mismo, impaciencia con los procedimientos de la ley y el deseo de venganza fuera del trabajo del sistema judicial (llevando a hacer justicia por sus propias manos), fanatismo en creencias políticas y generalmente deseando hacer mal a otros. Una definición moderna también incluiría odio e intolerancia hacia otros por razones como raza o religión, llevando a la discriminación. Las transgresiones derivadas de la ira están entre las más serias, incluyendo homicidio, asalto, discriminación y en casos extremos, genocidio.

La ira es el único pecado que no necesariamente se relaciona con el egoísmo y el interés personal (aunque uno puede tener ira por egoísmo, por ejemplo, por celos). Dante describe a la ira como «amor por la justicia pervertido a venganza y resentimiento»

ENVIDIA
Como la avaricia, se caracteriza por un deseo insaciable, sin embargo, difieren por dos grandes razones: Primero, la avaricia está más asociada con bienes materiales, mientras que la envidia puede ser más general; segundo, aquellos que cometen el pecado de la envidia desean algo que alguien más tiene, y que perciben que a ellos les hace falta, y a consiguiente desear el mal al prójimo, y sentirse bien con el mal ajeno

VANIDAD
En casi todas las listas de pecados, la soberbia (en latín, superbia) es considerado el menos serio de los pecados capitales, y de hecho, es también la principal fuente de la que derivan los otros. Es identificado como un deseo por ser más importante o atractivo que los demás, fallando en halagar a los otros.

Según la Biblia, este pecado es cometido por Lucifer al querer ser igual que Dios.

Genéricamente se define como la sobrevaloración del Yo respecto de otros por superar, alcanzar o superponerse a un obstáculo, situación o bien en alcanzar un estatus elevado y subvalorizar al contexto. También se puede definir la soberbia como la creencia de que todo lo que uno hace o dice es superior, y que se es capaz de superar todo lo que digan o hagan los demás. También se puede tomar la soberbia en cosas vanas y vacías (vanidad) y en la opinión de uno mismo exaltada a un nivel crítico y desmesurado (prepotencia).


SOBERBIA
Soberbia y orgullo , son propiamente sinónimos aun cuando coloquialmente se les atribuye connotaciones particulares cuyos matices las diferencian. Otros sinónimos son: altivez, arrogancia, vanidad, etc. Como antónimos tenemos: humildad, modestia, sencillez, etc. El principal matiz que las distingue está en que el orgullo es disimulable, e incluso apreciado, cuando surge de causas nobles o virtudes, mientras que a la soberbia se la concreta con el deseo de ser preferido a otros, basándose en la satisfacción de la propia vanidad, del Yo o ego. Por ejemplo, una persona Soberbia jamás se "rebajaría" a pedir perdón, o ayuda, etc.

LIDERES DE OPINION

Puede decirse que el liderazgo es el conjunto de capacidades que un individuo tiene para influir en un colectivo de personas, haciendo que este colectivo trabaje con entusiasmo en el logro de objetivos comunes. Se entiende como la capacidad de tomar la iniciativa, gestionar, convocar, promover, incentivar, motivar y evaluar a un grupo o equipo. En la administración de empresas el liderazgo es el ejercicio de la actividad ejecutiva en un proyecto, de forma eficaz y eficiente, sea éste personal, gerencial o institucional (dentro del proceso administrativo de la organización).

Implica que haya una persona (líder o no) que pueda influir y motivar a los demás (seguidores). De ahí que en los estudios sobre liderazgo se haga énfasis en la capacidad de persuasión e influencia. Tradicionalmente, a la suma de estas dos variables se le ha denominado carisma. Sin embargo, los estudios actuales en psicología y sociología han concluido que el carisma no tiene la importancia que históricamente se le había otorgado y que hay otros factores que son más determinantes a la hora de construir el liderazgo.[1]

El tercer aspecto del liderazgo es la capacidad para usar las diferentes formas del poder para influiren la conducta de los seguidores, de diferentes maneras. El cuarto es la combinación de los tres primeros, pero reconoce que el liderazgo es cuestión de valores.



Categorías y tipos de líder
Líder autocrático
Líder democrático
Líder laissez faire
Líder paternalista
Líder carismático
Liderazgo lateral



Tres tipos de liderazgo que se refieren a formas variadas de autoridad:

"Líder tradicional": es aquél que hereda el poder por costumbre o por un cargo importante, o que pertenece a un grupo familiar de élite que ha tenido el poder desde hace generaciones. Ejemplos: un reinado.

Líder legítimo: Podríamos pensar en "líder legítimo" y "líder ilegítimo". El primero es aquella persona que adquiere el poder mediante procedimientos autorizados en las normas legales, mientras que el líder ilegítimo es el que adquiere su autoridad a través del uso de la ilegalidad. Al líder ilegítimo ni siquiera se le puede considerar líder, puesto que una de las características del liderazgo es precisamente la capacidad de convocar y convencer, así que un "liderazgo por medio de la fuerza" no es otra cosa que carencia del mismo.

Líder carismático: es el que tiene la capacidad de generar entusiasmo. Es elegido como líder por su manera de dar entusiasmo a sus seguidores.

INSTITUCIONES RELIGIOSAS

LO UNICO QUE HACEN ESTAS INSTITUCIONES ES TRATAR DE INFLUENCIARNOS PARA PENSAR COMO ELLOS Y HACER "COSAS BUENAS" COMO DICE DIOS, LAS RELIGIONES SON UNA INFLUENCIA MUY GRANDE EN NUESTRA VIDA Y EN LA O.P. YA QUE DEPENDE DE LO QUE DIGAN, ACTUAMOS COMO EN EL TEMA DE LOS ANTICONCEPTIVOS ELLOS DICEN QUE USARLOS ES ESTAR ACTUANDO EN CONTRA DE LA VIDA QUE DIOS NOS DA, PERO SI LA GENTE YA NO TIENE NI CON QUE MANTENERLOS, COMO LES OBLIGAS MEDIANTE PLATICAS DONDE DICES: "DIOS,NO ESTA DE ACUERDO" OBVIAMENTE LOS QUE SON MUY RELIGIOSOS Y TEMEN DEFRAUDAR A DIOS, HARAN LO QUE LA IGLESIA DICE.

La religión es un sistema de la actividad humana compuesto por creencias y prácticas acerca de lo considerado como divino o sagrado, tanto personales como colectivas, de tipo existencial, moral y espiritual. Se habla de «religiones» para hacer referencia a formas específicas de manifestación del fenómeno religioso, compartidas por los diferentes grupos humanos. Hay religiones que están organizadas de formas más o menos rígidas, mientras que otras carecen de estructura formal y están integradas en las tradiciones culturales de la sociedad o etnia en la que se practican. El término hace referencia tanto a las creencias y prácticas personales como a ritos y enseñanzas colectivas.

organización de las religiones
A lo largo de la Historia, la práctica de la religión se ha organizado de diferentes maneras en sociedad. El hombre primitivo depositaba en el chamán o curandero el conocimiento y explicaciones sobre asuntos religiosos. Esta figura aún existe en pueblos indígenas de América, Africa y Oceanía.

Las primeras civilizaciones agricolas, con el desarrollo de las ciudades, verán surgir la figura del sacerdote, que se erige como mediador entre la sociedad y las divinidades. Esta figura cobrará una importancia enorme en Egipto, Grecia, Roma y América precolombina. A menudo con una doble función de médico y guía espiritual, supone una evolución del antiguo guía-chamán de la tribus primitivas.


Posturas en torno a la religión
En ocasiones es importante distinguir entre «religión» y «postura religiosa». Siendo la religión un sistema de creencias, preceptos, prácticas y rituales, una postura religiosa se refiere a la forma como un individuo se identifica frente a una o varias religiones. Por otro lado, existe la postura de quienes niegan el valor o la utilidad de las religiones, las niegan o las adecúan a sus propios planteamientos personales o de grupo.


También se observan diferentes posturas religiosas en los enfoques de aplicación a la sociedad en temas como el laicismo o el diálogo interreligioso.

Religiosas: afirma la pertenencia a alguna religión o credo.
Practicantes: asumen algún mensaje o contenido religioso e intentan ponerlo en práctica siguiendo prácticas, ritos o celebraciones.
No Practicantes: asumen algún mensaje o contenido religioso pero no participan de prácticas, ritos o celebraciones.
No religiosas: niegan explícitamente la pertenencia a alguna religión o credo, o están en desacuerdo con los contenidos de las religiones.
Ateos: (del griego a=sin teo=dios) sin dios. Ateo es quien vive ajeno a la consideración de alguna deidad que influya en la realidad. El término ateísmo se puede referir a dos actitudes distintas: la indiferencia por la existencia de divinidades o la no creencia en la posibilidad de su existencia.
apateístas: un ateísmo en el que se mantienen una postura de considerar que la posible existencia de deidades y la búsqueda de conocimiento al respecto no es importante, y que en consecuencia el debate al respecto debe ser ignorado. Según Etienne Borne, el apateísmo supone un ateísmo llevado a la práctica.
Fundamentalismo: el fundamentalismo se basa en la aplicación de un dogma o creencia de manera literal, sea religioso o de otro tipo, negando así el valor de otras explicaciones o la potencial ampliación de significados para cualquier certeza. El fundamentalismo elimina la posibilidad de coexistencia de interpretaciones diferentes de la realidad y la existencia, necesitando a menudo de su desaparición o eliminación para satisfacer un criterio único de verdad.
Laicismo: la palabra viene del griego laikus (pueblo) en oposición a klerikus(clérigo). La palabra laico define por tanto a aquellos que no son clérigos, ya sea dentro de la organización religiosa como en toda la sociedad civil. El laicismo afirma la necesidad de una ordenación de la sociedad sin la participación directa de los clérigos y por lo tanto independiente de la influencia religiosa. La defensa del laicismo implica que deben ser los laicos quienes diseñen, ordenen y apliquen las leyes, usos y costumbres de una sociedad, dejando a los clérigos esa función sólo para el ámbito de sus organizaciones religiosas. El laicismo supone una visión de la sociedad cuya defensa ha existido históricamente tanto dentro como fuera de las religiones.
Diálogo Interreligioso: aunque históricamente las religiones del mundo han tenido contacto entre sí y conocimiento unas de otras, no será hasta el siglo XX cuando la humanidad establezca la necesidad pública de un canal de comunicación constante y activo en lo que se ha llamado diálogo interreligioso. Las principales religiones y sus líderes han efectuado en las últimas décadas llamamientos para aumentar éste diálogo como vía para erradicar los fundamentalismos y contribuir a la paz en el mundo. Los encuentros de este tipo más famosos han sido los de Asís teniendo como anfitriona a la iglesia católica y agrupando a las principales religiones del mundo, los de Getsemaní realizados para un diálogo entre religiones occidentales y orientales, y recientemente el convocado por el islam de la mano del rey de Arabia Saudí, Abdullah Bin Abdelaziz, que por primera vez abre de manera explícita al islam a este tipo de encuentros.

En religiones como la hebrea o el islam, son las personas con una notable capacidad de interpretación de las escrituras sagradas las que ostentan el papel de guía de una comunidad de seguidores. Así, la figura del imán o del rabino están presentes en estas religiones.

En el entorno hinduista, la casta de los brahmanes es la encargada de aclarar los asuntos religiosos.

Asociaciones Civiles

Es un convenio celebrado entre dos o más asociados, mediante el cual aportan algo en común, generalmente recursos, conocimientos, esfuerzo o trabajo, para realizar un fin común lícito preponderante no económico, obligándose mutuamente a darse cuenta.

La diferencia entre Sociedades Civiles y Asociaciones Civiles, es que las primeras realizan un fun común lícito preponderantemente económico, y las asociaciones civiles realizan un fin preponderantemente no económico, es decir, un fin común deportivo, religioso, cultural, etc., sin constituir una especulación comercial.

Se caracteriza por tener un contrato bilateral o plurilateral.

Bilateral cuando intervienen dos socios, plurilateral cuando intervienen más de dos.

  • Contrato oneroso.
En virtud de que los socios reciben provechosos y grávenes recíprocos, sin constituir una especulación comercial.

  • Contrato formal.
Supuesto que el contrato de asociación civil deba formularse ante notario público.

SINDICATOS

Un sindicato es una organización democrática, integrada por trabajadores en defensa y promoción de sus intereses sociales, económicos y profesionales relacionados con su actividad laboral, respecto al centro de producción (fábrica, taller, empresa) o al empleador con el que están relacionados contractualmente.

CLASES DE SINDICATOS


Pueden distinguirse los sindicatos de ramo que agrupa a los trabajadores conforme la actividad de la empresa en la cual se desempeñan, de los sindicatos de oficio que agrupa a quienes se desempeñan en cierto oficio con independencia de la actividad de la empresa en la cual trabajan. Serían por ejemplo sindicatos de ramo los de la industria metalúrgica, los de la educación o los del sector público, y sindicatos de oficio los de viajantes de comercio o de camioneros.

Existen también los sindicatos de empresa que reunen a los trabajadores de una empresa en particular, que, en general, solamente son posibles en grandes establecimientos.

Se denominan sindicatos de primer grado a aquellos que están formados por trabajadores, de segundo grado, llamados en general federaciones o confederaciones, los que agrupan sindicatos de primer grado y sindicatos de tercer grado a los que agrupan sindicatos de segundo grado. Un ejemplo de sindicato de tercer grado es el de la Confederación General del Trabajo de Argentina.

El sindicato de oficios varios surge como grupo de trabajo cuando no hay suficientes trabajadores para formar sindicatos de oficio o de ramo. En el otro extremo, la central sindical agrupa a nivel nacional a sindicatos de diversos ramos, y a su vez pueden estar afiliadas a federaciones internacionales o mundiales. El Congreso de Sindicatos Sudafricanos, por ejemplo, es la central sindical que estuvo implicada en la lucha contra el apartheid en Sudáfrica. De talla intermedia, agrupando por ramo y por geografía, existe la federación de industria.

De acuerdo con su ideología, más allá del modelo más extendido de sindicato de clase —sea comunista o anarquista— se distinguen el llamado sindicato amarillo o vertical, que defiende los intereses del empleador; a veces se acusa a algunos sindicatos de empresa de ser amarillos, o se usa el término de forma despectiva para calificar a sindicatos o centrales sindicales a los que se ve como poco combativos. También tiene importancia histórica en la España del franquismo el sindicato falangista. .

El modo de financiación de los distintos sindicatos también permite distinguir entre los que aceptan subvenciones o ayuda del Estado y los que se limitan a las aportaciones de sus afiliados, por ejemplo a través de estampillas sindicales.




Asociaciones Políticas

La constitución como fenómeno social es el equilibrio entre el poder y la colectividad. Muchas veces los hechos sociales y la realidad de un país rebasan el estatuto de organización del Estado en cuanto tal, la constitución deja de serlo.

En el Estado democrático contemporáneo, este equilibrio se vuelve más complejo en virtud de las distintas tendencias sociales que en él se manifiestan, ya en el análisis que de la constitución prusiana de 1862 formuló Lasalle, afirmaba que una de las circunstancias del poder, es la conciencia del derecho que tiene la masa.
El derecho de asociación y la participación política, son conceptos complementarios para la búsqueda de la libertad en el marco del Estado democrático. Los mecanismos de estabilización, para que esa participación sea reflejo de las corrientes de opinión y de las ideologías de las minorías, en un contexto jurídico deben propender al relajamiento de la tensión entre la responsabilidad y la propia libertad.

Después de la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789 en Francia, la libertad de asociación fue paulatinamente integrada en las constituciones de casi todos los países del mundo, como uno de los principales significados de la libertad del hombre.

Cuando este derecho trasciende la posibilidad de actuar políticamente en un sistema político determinado, los servicios mutuos que los asociados se prestan son en sí mismos un medio seguro de lograr el fin común.

Este fin común, no podría ser alcanzado en forma aislada por cada individuo y, en cambio la asociación tiende a la consecución de determinados objetivos cuya realización es constante y permanente.

Si a esto agregamos que este fin común es de índole política, se asegura la autonomía del hombre en la fusión de una sola voluntad que obtendrá mayor fuerza colectiva.

En una sociedad pluralista, las asociaciones representan, los intereses de sus afiliados. En este sentido, debemos distinguir dos funciones que son desarrolladas por las asociaciones como grupos de acción: una hacia adentro del propio grupo, mediante la cual se fortalece la conciencia que cada uno como individuo desarrolla en orden a su pertenencia a la asociación, y otra hacia afuera, mediante la cual se convierten en grupos que ejercen influencia política, con una corriente de opinión determinada y en algunos casos, con una ideología precisa.

¿QUE SON LAS ONG?

Una organización no gubernamental (también conocida por siglas ONG) es una entidad de carácter público, con diferentes fines y objetivos humanitarios y sociales definidos por sus integrantes, creada independientemente por los gobiernos locales, regionales y nacionales, así como también de organismos internacionales.

Jurídicamente adopta diferentes estatus, tales como asociación, fundación, corporación y cooperativa, entre otras formas. Al conjunto del sector que integran las ONG se le denomina de diferentes formas, tales como organizaciones de la sociedad civil, sector voluntario, sector no lucrativo, sector solidario, economía social, tercer sector y sector social. Su membresía está compuesta por voluntarios y trabajadores contratados. Internamente pueden tener un bajo o alto grado de organización. El financiamiento de actividades, generalmente proviene de diversas fuentes: personas particulares, Estados y otras Administraciones Públicas, organismos internacionales, empresas, otras ONG, etc.

La expresión Organizaciones no Gubernamentales (ONG) nació a raíz de la invitación recibida por algunas organizaciones sociales por parte de la ONU en la década de 1960, para asistir sus asambleas como invitadas. Dado que la ONU es una organización de estados se buscó diferenciar los niveles.


Una clasificación usada para los tipos de ONG, puede ser:[cita requerida]

1.Organizaciones voluntarias
2.Agencias y organismos de servicios no lucrativos
3.Organizaciones comunitarias o populares
4.Organizaciones no gubernamentales para el desarrollo (ONGD)
5.Organizaciones de Inmigración
Algunas actividades a nivel internacional afrontadas por las ONG son

Garantías de la aplicación de tratados internacionales humanitarios.
Promoción y denuncia de los abusos de los derechos humanos.
Vivienda social.
Ayuda humanitaria.
Protección del medio ambiente.
Laborales y medioambientales.
Cooperación para el desarrollo.
Ayuda a la infancia.
Ayuda y orientación a la Tercera Edad.
Inmigración.
Gestión de riesgos de desastres.
Comunicación para el desarrollo.
Participación ciudadana.



martes, 26 de octubre de 2010

La Familia


La familia, según la Declaración Universal de los Derechos Humanos, es el elemento natural y fundamental de la sociedad y tiene derecho a la protección de la sociedad y del Estado. Los lazos principales que definen una familia son de dos tipos: vínculos de afinidad derivados del establecimiento de un vínculo reconocido socialmente, como el matrimonio —que, en algunas sociedades, sólo permite la unión entre dos personas mientras que en otras es posible la poligamia—, y vínculos de consanguinidad, como la filiación entre padres e hijos o los lazos que se establecen entre los hermanos que descienden de un mismo padre. También puede diferenciarse la familia según el grado de parentesco entre sus miembros.

La familia, es la base para que todo ser humano, se pueda integrar de manera correcta a la sociedad. Por lo mismo, es que sus integrantes menores, deben ver los aspectos positivos de su familia, para potenciarlos en un futuro cercano. Asimismo, los aspectos negativos, deben ser estudiados y anotados, para que ellos no los vuelvan a repetir. En el fondo, a la familia, se le considera la escuela primaria, frente a los desafíos sociales, de los hijos.

Es en la familia, donde el ser humano, aprenderá lo que son los afectos y valores. De que manera hay que manejarlos y que es lo correcto a realizar y lo que no. La formación valórica de la familia, es irremplazable. Aquello no lo aprenderá en el colegio o la universidad. Sólo en su familia. Núcleo de amor, afecto y comprensión. Al igual, que escuela primordial de los valores y virtudes a seguir

Renacimiento.

El Renacimiento es fruto de la difusión de las ideas del humanismo, que determinaron una nueva concepción del hombre y del mundo.
El nombre "renacimiento" se utilizó porque éste retomaba los elementos de la cultura clásica. El término simboliza la reactivación del conocimiento y el progreso tras siglos de predominio de un tipo de mentalidad dogmática establecida en la Europa de la Edad Media. Esta nueva etapa planteó una nueva forma de ver el mundo y al ser humano, el interés por las artes, la política y las ciencias, revisando el teocentrismo medieval y sustituyéndolo por cierto antropocentrismo.
El historiador y artista Giorgio Vasari había formulado una idea determinante, el nuevo nacimiento del arte antiguo, que presuponía una marcada conciencia histórica individual, fenómeno completamente nuevo en la actitud espiritual del artista.
De hecho, el Renacimiento rompió, conscientemente, con la tradición artística de la Edad Media, a la que calificó como un estilo de bárbaros, que más tarde recibirá el calificativo de gótico. Con la misma conciencia, el movimiento renacentista se opuso al arte contemporáneo del norte de Europa.

Revolución Francesa.

La Revolución Francesa.
La interpretación conservadora es la más antigua, ya que es la visión de los conservadores monárquicos. Durante mucho tiempo fue la más generalizada. Su juicio de la revolución se fundamenta en la crítica a los hechos concretos, apelando a los valores tradicionales, cuando no naturales, que se vulneraron durante la revolución.
Para los liberales, la Revolución francesa comienza con el mismo acto revolucionario: la convocatoria de la Asamblea Nacional Constituyente el 17 de junio de 1789. Se trataba de liquidar de un golpe la representación particular de los intereses de los estamentos privilegiados.
Esta interpretación mitifica el periodo de la Monarquía Constitucional y hace un repudio absoluto de la época de la Convención, no sólo del Terror.
La interpretación de los socialistas franceses hace una gran aportación al conocimiento de los antecedentes y a la situación previa a la revolución. Esta labor se lleva a cabo desde la Sociedad de Estudios Robesperristas, que publica las crónicas históricas de la revolución francesa.
La interpretación marxista-leninista estuvo, hasta los años sesenta del siglo XX, restringida a la Unión Soviética y su entorno, pero desde esa época se extendió por todo el mundo. Es un análisis que se fundamenta en el materialismo histórico. Concibe a la Revolución francesa como una, la primera, revolución burguesa, a la que temporalmente se unieron el campesinado y el proletariado, así como los pequeños burgueses, para derrotar al sistema feudal absolutista. La revolución fue, así, resultado de la lucha de clases.
La interpretación estructuralista se centra en tratar de solucionar los problemas específicos, como los que se observan en la economía, la sociedad, el derecho o las instituciones. Pretende una interpretación del conjunto de los hechos de la revolución y con múltiples puntos de vista.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

O.P EN LA REVOLUCION INDUSTRIAL


La Revolución Industrial constituye de este modo el pecado original del capitalismo, cuando no la prueba de que el libre mercado es inherentemente injusto y debe ser corregido o superado por otro sistema que no esté en contradicción con la justicia social. La prosperidad de que gozamos, alegan, se alza sobre el sacrificio de aquellas generaciones pretéritas. El nuestro es un progreso teñido de culpa. Y si el capitalismo, para generar bienestar, requiere de un período inicial de penuria y explotación intensificada y generalizada, es que el capitalismo es indigno per se, porque nada intrínsecamente justo necesita de lo injusto para desarrollarse

La Revolución Industrial inglesa, que cabe ubicar entre mediados-finales del siglo XVIII y mediados del siglo XIX, ha sido objeto de estudio de un sinnúmero de historiadores que durante décadas, imbuidos de ideas marxistas, carentes de rigor e imparcialidad, faltos de una teoría previa y una metodología adecuada, difundieron una visión radicalmente distorsionada y partidista de la realidad, un dramatizado cuadro que se alejaba de los hechos tanto como se ajustaba a los esquemas ideológicos de la pujante masa socialista. Esta falaz interpretación de los acontecimientos fue revisada, criticada e impugnada por la mejor historiografía económica en la primera mitad del siglo XX. Pese a ello, aún predomina en la opinión pública, refrendando las ideas estatistas esparcidas por doquier.


“La revolución industrial provocó en Inglaterra, como también en América, una miseria indescriptible. En mi opinión, apenas nadie que se ocupe de historia económica puede dudar que el nivel medio de vida en la Inglaterra de los primeros años del XIX era más bajo que el de cien años antes; y esto ha de atribuirse casi exclusivamente a la técnica científica” por Bertrand Russell.

Esto nos muestra que la gente de esa epoca y viviendo esas situaciones, tal ves tenian una opinion diferente a la que nosotros podamos tener, solo leyendo lo que pasaba en ese entonces.

CARACTERISTICAS O.P. (en la antigüedad)


-En grecia, eran aceptados los homosexuales; las mujeres segun ellos, solo eran para procrear.

Para buscar placer o pasiòn los hombres buscaban a otros hombres.


-En Roma, la prostituciòn era de lo mas normal y hasta lo veian como un bien social.

-Algo tambien dentro de la O.P. que se consideraba normal era vomitar la comida, lo que ahora conocemos como Bulimia.

-La pornografia, era tan aceptable que en todas las casas existia algo relacionado al tema.

O.P. EN LA EDAD MEDIA

Tras la caída del Imperio Romano la influencia de los pueblos germánicos traería nuevas ideas sobre el derecho y el gobierno arrinconado viejos conceptos relativos a las diferencias entre esfera privada y esfera publica.

Tomas de Aquino alababa la monarquía, atacaba la tiranía y reconoce ciertos poderes en el pueblo cuando el gobierno es elegido democráticamente. En Juan Pablo de París, aflora la influencia secularizada de la época, defendiendo la separación entre la autoridad espiritual y apoyaba el consenso popular como fundamento del poder político.

O.P. EN LA ANTIGÜEDAD.

En la antigüedad la opinión publica se remitía simplemente al dialogo que establecían los notables, es decir, sólo aquellos que no dependían económicamente de magna era, opinar y dialogar sobre las cuestiones de la polis, ya que sólo eran aptos para trabajos manuales. Consecuentemente imperaba la marginalidad en el espacio publico y no existía el diálogo sobre asuntos públicos.

Posteriormente, esa situación empezó a cambiar. Se conceptualizaba entonces como la opinión "del pueblo". Durante el siglo XVIII español, el concepto de opinión pública equivalía a “opinión de la multitud”, normalmente expresada a través de una reunión masiva. A finales de este siglo, sin embargo, empieza a adquirir connotaciones cualitativas y adquiere las notas propias que le otorgaría el liberalismo, como instrumento de guía y control del gobernante.

El liberalismo progresista posterior añadió la idea de que sólo los ciudadanos activos, aquellos que participaban en política, expresaban la verdadera opinión pública, que se transmitía a través del ejercicio de libertades naturales y que sólo limitaba al Ejecutivo a través de la responsabilidad moral. Conviene recordar que en aquellos tiempos sólo se consideraban ciudadanos (con derecho a participar en asuntos políticos) las minorías gobernantes o dominantes de las naciones occidentales o colonias.

Què es Opiniòn Pùblica??

Es la tendencia o preferencia, real o estimulada, de una sociedad hacia hechos sociales que le reporten interès.
La Opiniòn Pùblica ha sido el concepto dominante en lo que ahora parece referirse a la comunicacion politica.
Y es que despues de muchos intentos y de una serie de estudios la experiencia parece indicar que opiniòn pùblica implica muchas cosas a la vez, pero al mismo tiempo, ninguna de ellas domina o explica el conjunto. Aùn cuando se relaciona estrechamente con la comunicaciòn polìtica, se diferencia de esta.

Es decir, la opiniòn pùblica constituye solo un sector dentro del amplio espectro de la comunicaciòn polìtica.

domingo, 12 de septiembre de 2010

Enfoque Teórico Multidisciplinario

SOCIOLÓGICO.

Desde una perspectiva psicológica, Elizabeth Noelle- Newman (1974) construye una definición operativa en la que situa la opinión pública como "las opiniones sobre temas controvertidos que pueden expresarse en público sin aislarse".

ejemplo: Aborto Sí (actitud progresista)
No (actitud conservadora )
Al opinar sobre este problema social se enfoca en las causas, el impacto humano o desde el punto de vista de los valores morales.

Los valores son predisposiciones todavía más fuertes y que suelen hacer más sólidos a lo largo del tiempo. Son aquellos enseñados o aprendidos.



POLÍTICO.

No existe opinión pública en estados autocráticos, ello debido a que el debate público es inexistente.

Sólo existe la voz oficial, que es rutinariamente favorable al gobierno. Se manifiesta la opinión pública de la opresión, no de la expresión. En estos casos se pueden desarrollar opiniones privadas que pueden extenderse en condiciones de represión hasta en un momento que puedan expresarse e irrumpir libremente, en forma de cambio de régimen por medio de un proceso transicional o revolucionario.

El sistema democrático requiere la opinión pública en la medida que es un elemento importante en la supervivencia del sistema.

Por esto algunos autores consideraban como una de sus funciones la vigilancia y el control de la vida política.

La opinión desarrolla una conciencia colectiva que participa, vigila y expresa sus puntos de vista sobre los temas de interés general.

ejemplo: En estos casos se pueden desarrollar opiniones privadas que (pueden) suelen extenderse en condiciones de represión, hasta un momento en que puedan expresarse e irrumpir libremente en forma de cambio de régimen, por medio de un proceso transicional o revolucionario, como ocurrió en Chile de Pinochet, en 1989 y en Europa del este, el mismo año.



FILOSÓFICO.

En la filosofia hallaremos respuestas a los enteros "porqués" del fenómeno. Ésta ciencia de ciencias, con la profundidad de sus interrogantes y direcciones hacia la escencia misma de las cosas es indispensable para el reconocimiento del objeto. Pues a los filósofos e historiadores se debe gran parte de las proposiciones distintivas acerca de la opinión pública.

ejemplo: Si alguien decide hacer algo indebido, como pegarle a un policía, todos lo ven como malo, pero ¿quién te dice que es malo?. ¿por qué lo es?, ¿alguien sabe tus razones?.



PSICOLÓGICO.

Se centra en la psicología social de los años 30´s, se entiende como la suma de actitudes y opiniones individuales.

La opinión pública, se plantea como un estudio comprensivo de la comunicación que el fundamento de la sociedad. Sirve de fundamento básico para la importancia y el papel de los Mass Media. Los grupos institucionales y empresas de la comunicación.

ejemplo: Existen normas que se deben seguir en la sociedad así mismo existen personas, la opinión pública, que se preguntan, por qué los hay, quien dice que algo es bueno o malo y por qué son así. Laopinión pública dice que robar está mal, cuando alguien roba y no es acusado por nadie, psicológicamente sabrá que es culpable.



ECONÓMICO.

Los sectores oligárquicos favorecidos y enriquecidos se afianzan al poder y apoyan al proceso, política, social, cultural y económicamente por lo que los géneros de opinión son de tal importancia.

Los empresarios necesitan de la opinión pública, para darle liderazgo a sus productos y éste se vea reflejado en sus ventas.

ejemplo: Opinión a favor de encontrar una Universidad pública.

1. Costes económicos
2. Conflicto entre las partes: un sector aceptan las universidades privadas como ligadas a grupos religiosos o ideológicos y otros insisten en la educación laica.
3. Causas: defender el derecho a la educación.
4. Impacto humano.
5. Moral.

Esas partes participan activamente por lo menos cognitivo, es un proceso colectivo y público.





La Opinión Pública segùn HABERMAS


Opinión Pública, significa cosas distintas según se contemple con una instancia crítica a la noción de la notoriedad pública, normativamente licitada del ejercicio del poder político y social o como una instancia receptiva en relación a la notoriedad pública representativa o manipulativamente divulgada, de personas e instituciones, de bienes de consumo y de programas. En la publicidad concurren ambas formas de notoriedad pública, la opinión pública es su común destinatario.

Los movimientos de adhesión, a las grandes corrientes de opinión son un acto reflejo del sentimiento protector que confiere la mayoría y el rechazo al aislamiento, al silencio y a la exclusión.

Los individuos tenemos un sentido perceptivo de evaluación del ambiente ideológico, de los modos de opinión y de los valores que constituyen valores mayoritarios.